En una primera reacción durante un mítin en Michigan, el presidente dijo que los demócratas están tratando de «anular» su triunfo electoral en 2020 y que están «consumidos por el odio».
La Cámara de Representantes de Estados Unidos, controlada por los demócratas, aprobó este miércoles (18.12.2019) la acusación contra el presidente Donald Trump por abuso de poder y obstrucción al trabajo del Congreso, abriendo la vía para un juicio en el Senado para su destitución.
La acusación de abuso de poder se aprobó primero, por mayoría simple, y luego siguió la votación sobre el cargo de obstrucción al trabajo del Congreso, que también obtuvo el apoyo de la mayoría de los legisladores.
La Cámara de Representantes logró los 216 votos necesarios para imputar el cargo político de abuso de poder contra Trump. Un total de 230 legisladores apoyaron el juicio al mandatario, mientras que 197 votaron en contra y uno se abstuvo.
Posteriormente, los legisladores aprobaron con 229 votos a favor, 198 en contra y una abstención imputar el cargo político de obstrucción al Congreso.
El tercero al banquillo
La decisión de la Cámara Baja en favor de un juicio político contra el presidente de Estados Unidos era previsible dada la cómoda mayoría demócrata que existe en la Cámara.
A lo largo del día, los legisladores escucharon los argumentos de una y otra bancada a favor y en contra del llamado «impeachment», como se conoce en inglés al juicio político.
La histórica votación convierte a Trump en el tercer mandatario en la historia de Estados Unidos en ser sometido a un juicio político, por abusar de su cargo al pedirle a Ucrania investigar a su posible rival electoral en 2020, Joe Biden, y por bloquear los esfuerzos de los legisladores para indagar sobre sus acciones.
En una primera reacción durante un mitin en Battle Creek (Michigan), el presidente dijo que los demócratas están tratando de «anular» su triunfo electoral en 2020 y que están «consumidos por el odio».
«Soy la primera persona a la que llevan a un juicio político sin delito. Díganme qué hice, ¿dónde está el delito?», preguntó el gobernante republicano ante sus simpatizantes que lo ovacionaron.
Agregó que los cargos en su contra suponen un «suicidio» político y una «eterna marca de vergüenza» para los demócratas.
«A través de sus acciones depravadas de hoy, los locos demócratas de Nancy Pelosi se han señalado con una marca eterna de vergüenza», dijo Trump en referencia a la presidenta de la Cámara Baja minutos después de concluir la segunda votación.