El Gobierno sueco anunció este jueves que pretende tener listo en verano un pasaporte digital para quienes hayan recibido la vacuna contra la COVID-19.
«Todos los vacunados tienen derecho a recibir un certificado. Ahora impulsaremos una infraestructura digital para un pasaporte de vacunación y una verificación. Eso hará el certificado más seguro, sencillo y utilizable en el extranjero», señaló en rueda de prensa el ministro de Digitalización, Anders Ygeman.
Ygeman resaltó que el objetivo es que el proceso, para el que se involucrarán tres autoridades distintas, vaya «lo más rápido posible» y que la infraestructura digital esté lista en verano.
«El certificado de vacunación es casi tan demandado como la propia vacuna», afirmó en la misma comparecencia la ministra de Asuntos Sociales, Lena Hallengren.
Las autoridades danesas habían presentado ayer una iniciativa similar, que estará lista en «3 o 4 meses» y que pretenden usar en la reapertura de la sociedad, para facilitar la participación en la vida cultural y permitir los viajes, aunque todavía no se ha informado de cómo se aplicará.
Cambio en el proceso de vacunación
Las autoridades suecas anunciaron también un ajuste en el proceso de vacunación, de modo que en la segunda fase se incluirán a los mayores de 65 años y no de 70, como estaba fijado hasta ahora.
Suecia, que ha vacunado ya el 3.1% de su población mayor de edad, mantiene su objetivo de terminar el proceso en el primer semestre de este año.
Con una estrategia más laxa que el resto de sus vecinos, Suecia ha registrado 580,916 casos de coronavirus y 11,939 muertos, con una tasa de mortalidad de 116.02 por cada 100,000 habitantes, tres veces más que Dinamarca y diez que Finlandia y Noruega, aunque por debajo de países como Bélgica, Reino Unido, Italia, España y Portugal.