Luego de un año de entregada la orden de proceder para la construcción de la nueva Escuela Miguel Alba, principal centro público de educación básica general del Distrito de Soná y segundo más importante de la provincia de Veraguas, los padres de familia y comunidad en general protestaron a las afueras del ya demolido centro.
Durante la convocatoria los dirigentes y padres de familia señalaron que el retraso de la obra se debe a que el departamento encargado de aprobar los planos por parte del MEDUCA, demoró once meses en aprobar tan solo una parte del proyecto, tras la aprobación por parte del Ministerio de Educación se conoció que el ingeniero municipal del Distrito de Soná, hizo un hallazgo de 15 fallas estructurales que podía poner en riesgo la vida de los estudiantes, por lo que pidió la documentación para subsanar dichas fallas.
Entre las fallas se mencionó que se pretendía utilizar menos acero que el recomendado para el tipo de estructura que se pretende construir, todo esto para abaratar los costos del proyecto señalaron los presentes.
Los Sonaeños convocaron a la comunidad a que se apersonara al Palacio Municipal del Distrito el día de mañana, cuando representantes del MEDUCA y la empresa encargada de construir el proyecto se habrían comprometido en subsanar los documentos que mantienen retrasados los permisos de construcción.
Los dirigentes de la protesta fueron enfaticos al señalar que no permitiran una obra con fallas y que no quieren correr la suerte del proyecto del Instituto Profesional y Técnico de Veraguas (IPTV).
Por último se cuestionó las excusas dadas por la Ministra de Educación, Marcela Paredes de quien exigen una pronta respuesta.
Los Sonaeños que acudieron a la protesta terminaron su manifiesto cantando el cumpleaño a la orden de proceder con su respectivo dulce.