Con un pie en el precipicio en el sexto juego de la serie y obligados a ganar para seguir con vida, los Dodgers de Los Ángeles regresaron de su pesadilla quebrantando al estelar pitcher de los Astros de Houston. Justin Verlander, hasta anoche con foja de 9-0, anotándole dos carreras en la sexta entrada, en tanto que el pitcheo de los californianos se reivindicaba tras su pésima labor del pasado domingo, para llevar la Serie Mundial a un séptimo y decisivo juego, derrotando de 3-1 a los representantes de Texas, en casa.
Para el último partido, el japonés Yu Darvish abrirá por los Dodgers y por los Astros le corresponde a Lance McCullers Jr., encargados de detener las poderosas ofensivas, por lo que se espera que la labor sea la clave de quien se corone como el nuevo rey de la MLB.