El Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Democrático expresó en Conferencia de Prensa: “La administración de justicia en Panamá se encuentra en una grave y prolongada crisis, agravada notablemente en el período 2009-2016, debido entre otras circunstancias, a denuncias de corrupción, acusaciones recíprocas y conflictos de poder entre los operadores de justicia, hechos que han llevado a una situación de desestabilización institucional y baja credibilidad pública en el sistema judicial”.
Según la dirigencia PRD, no se tomaron las medidas necesarias frente a los requerimientos de nuestro sistema judicial debido a la avalancha de casos de corrupción derivados de la administración de Ricardo Martinelli.
La dirigencia del Partido Opositor hizo un llamado a que se respete la separación de los poderes y a que el Ministerio Público haga su trabajo, toda vez que los casos que se caen por fallas en la fiscalía, no debe interpretarse como la inexistencia de un acto de corrupción.