El vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, dijo este miércoles que el aspirante demócrata a la Presidencia, Joe Biden, y su compañera de fórmula, Kamala Harris, buscan el apoyo de los contribuyentes para financiar los abortos.
«Biden y Kamala Harris apoyar la financiación del contribuyente del aborto, todo el recorrido hasta el momento del nacimiento, abortos tardíos», dijo Pence, cristiano evangelista y abiertamente contrario al aborto, durante el debate frente a Harris.
El vicepresidente agregó que el dúo demócrata busca también financiar a Planned Parenthood, la mayor red de clínicas de salud sexual y reproductiva en Estados Unidos.
Ante estas palabras, Harris respondió: «Está el asunto de la elección, siempre lucharé por el derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo. Debería ser su decisión, no de Donald Trump ni de Mike Pence».
El vicepresidente también respaldó a la jueza conservadora nominada por Trump para el Tribunal Supremo de EE.UU., Amy Coney Barrett, sobre la que auguró que «permanecerá firme por el derecho a la vida».
Y pidió que no se le ataque por «su fe cristiana».
Por su parte, Harris contestó: «Es insultante sugerir que nosotros vayamos a atacar a alguien por su fe, de hecho, si Joe (Biden) es elegido será el segundo presidente de EE.UU. practicante del catolicismo».
Trump quiere que Barrett sea confirmada por el Senado antes de las elecciones del 3 de noviembre para consolidar así la mayoría conservadora en el Tribunal Supremo, que tiene el poder de cambiar las leyes del país durante décadas, al contar con nueve jueces con puestos vitalicios.
De ser confirmada, Barrett cubriría la vacante dejada en septiembre por el fallecimiento de la magistrada progresista Ruth Bader Ginsburg.