Singapore Airlines, comenzará su nueva ruta transatlántica el día 11 de octubre, marcando un hito en la aviación comercial, ya que con la conexión entre las dos ciudades, que hasta ahora se realizaba con una escala en Changi y Newark, desde ese momento las dos ciudades más dinámicas del mundo estarán comunicadas directamente por vuelos sin escala, atravesando el Océano Atlántico y que las separan unos 16,700 kilómetros, con una previsión para cubrir la distancia en 18,45 horas.
Hasta ahora Qatar Airways era la aerolínea que tenía la conexión más larga del mundo, el vuelo entre Auckland (Nueva Zelanda) y Doha se cubre en 17,30 horas. Nuevos aviones con consumos más eficientes y materiales más ligeros hacen posible volar cada día distancias más largas sin repostar.
Singapore Airlines ya tuvo la conexión directa con Nueva York, pero se vio obligada a suspenderla en 2013 porque la subida del precio del petróleo la hizo encarecer los costes. La aeronave que hará la ruta es el A350-900ULR, montado en la fábrica de Airbús en Toulouse (Francia). La compañia asiática ya ha recibido la primera unidad de los siete que recibirá antes de final de año, que va a destinar a las rutas de Los Angeles y San Francisco.
El precio en catálogo de esta aeronave es algo más de 317 millones de dólares, aunque el precio real suele ser muy inferior. Singapore Airlines, compañia integrada en Star Alliance, tiene una orden de compra de hasta 67 unidades de este modelo. Este Airbus tiene potencia para levantar en el momento del despegue, hasta 280 toneladas, y volar durante 20 horas seguidas sin aterrizar y recorrer un máximo de 9,700 millas náuticas (casi 18,000 km).
La capacidad de carga de los depósitos de combustible alcanzan los 165,000 litros, 24,000 más que el A350-900 stándar, gracias a unos depósitos reversibles, según informa Airbus. El consorcio europeo avanza que debido al uso de las últimas tecnologías, una aerodinámica avanzada y motores extraeficientes permiten ahorrar un 25% en combustible en comparación con las generaciones anteriores de propulsores de este modelo y con los de sus rivales directos Boeing (Boeing 777).
Otra de las mejoras que afectan al pasaje es el número de butacas, Singapore ha optado por la comodidad del pasajero y , para ello ha reducido el número de asientos a 67 plazas en Business, y 94 en premium economy. Dependiendo de la configuración que tengan los A350-900 tienen más de 300 plazas. «Nuestros clientes buscan una experiencia que permita dormir bien, ahorrar tiempo, evitar escalas y con una variedad de menús y de opciones de entretenimiento», explica la aerolínea.
Techos más altos, ventanas más grandes, asientos más espaciosos, mejor calidad del aire y mayor control de la humedad son otros factores que elevan la comodidad y reducir el «jet lag».
El coste del vuelo de inauguración es de 4,970 euros en business, aunque si prefiere hacer una escala y viajar en turista ese mismo día el importe es de 1,343 euros.