La Cámara Baja de Estados Unidos aprobó este jueves un proyecto de ley para retirar el trato comercial favorable a Rusia, lo que abre la puerta a la imposición de aranceles a los productos rusos.
La iniciativa, que tiene el apoyo del Partido Demócrata y Republicano, recibió la luz verde de la Cámara de Representantes con 424 votos a favor y 8 en contra, y ahora tiene que ser aprobada por el Senado antes de acabar en la mesa del presidente Joe Biden para que la firme.
La semana pasada, Biden adelantó la intención de EE.UU. y del resto de naciones del G7 de retirar el estatus como «nación más favorecida» a Rusia, pero antes debe ser aprobada por el Congreso estadounidense.
Ucrania y Canadá ya han retirado a Rusia el estatus de «nación más favorecida», uno de los principios fundamentales del comercio internacional por el que vela la Organización Mundial del Comercio (OMC).
En la práctica, la medida supone que EE.UU. y el resto de países que tomen la decisión podrán aplicar impuestos a las importaciones (aranceles) de Rusia al nivel que lo deseen, denegar a firmas rusas acceso a sus mercados de servicios y no proteger sus derechos de propiedad intelectual.
El estatus de «nación más favorecida» existe para evitar que los 164 países que forman la OMC establezcan discriminaciones entre ellos, por lo que si se concede a un país una ventaja especial, en general se debe hacer lo mismo con todos los demás miembros de la organización.
Rusia no es uno de los principales socios comerciales de EE.UU., pero el intercambio bilateral es notable: en 2019, las exportaciones rusas al país norteamericano ascendieron a 22.300 millones de dólares, según la Oficina del Representante de Comercio estadounidense.
Desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania, el pasado 24 de febrero, EE.UU. ha adoptado sanciones y medidas de castigo contra Moscú.