El Parlamento regional de Flandes (Bélgica) rechazó este miércoles (08.11.2017) una moción presentada por el partido ultraderechista flamenco Vlaams Belang para reconocer la independencia de la autonomía española de Cataluña, que fue respaldada solo por este grupo, minoritario en la cámara regional belga.
En el texto, tres diputados del grupo de extrema derecha nacionalista, Ortwin Depoortere, Chris Janssens y Stefaan Sintobin, pedían «condenar inequívocamente la represión española contra el esfuerzo independentista catalán» así como «instar al Gobierno federal a reconocer a Cataluña como un Estado independiente soberano».
Depoortere, parlamentario de Vlaams Belang, anunció durante el debate que su grupo presentaría una moción dirigida a los gobiernos de Bélgica y Flandes para reconocer «el Estado independiente catalán», que no fue secundada por la cámara.
La cámara regional flamenca celebró un debate sobre la comunidad autónoma española de Cataluña, unas horas más tarde de que lo hiciera el Parlamento federal en presencia del primer ministro belga, Charles Michel, quien fijó la posición de su Gobierno y aseguró que Bélgica «tiene un interlocutor, el Gobierno de Madrid».
La crisis catalana irrumpió así de lleno en la agenda política belga, pese a que Michel incidió en que «hay una crisis política en España y no en Bélgica», mientras las críticas de la oposición cuestionan el equilibrio político de un Gobierno compuesto por una mayoría de separatistas flamencos, la Nueva Alianza Flamenca (N-VA).
En la cámara regional, el parlamentario de este partido, Matthias Diependaele, consideró que el Gobierno regional flamenco debe «expresarse» sobre este asunto. «Compartimos el mismo espacio político democrático con España y Cataluña. Lo que está sucediendo también es importante para nosotros», dijo durante el debate.
Desde los democristianos del CD&V, otro de los partidos que gobiernan en coalición con Michel (del único partido francófono en el Gobierno, el liberal MR), Peter Van Rompuy expresó que «lo primero, es que los propios catalanes se pronuncien en las elecciones (autonómicas) del 21 de diciembre». Opinó que «después de esto debe haber negociaciones entre los gobiernos de Cataluña y España». (EFE)